Hubiese preferido que me avisaran. Mil veces hubiera preferido eso, a generarme expectativa acerca de, lo más o menos digna, que podría ser la vida. Porque en definitiva, es cómo vivir una ilusión, que más tarde o más temprano, termina por arrancarnos la inocencia de un tirón.
Eventualmente las cosas pueden salir bien, es cierto. Sin embargo, uno vive con una sensación de alerta permanente. Cómo esperando que algo suceda. Que alguien corte, de cuajo con la buena racha prestada y nos lleve derechito y de prepo hasta la desdicha, sin escala.
Pareciera que uno vive con un manto en los ojos que cubre, aunque no del todo, la malicia de quienes nos rodean. Llega un momento en el que somos profanados, y nos quitan hasta ese velo, que nos resguardaba de tanta crudeza.
Hay un mandato primero que todos nos ocupamos en cumplir. Que nos obliga a ser buenos, culposos, y concientes. Lo que sucede, es que inmediatamente hay otro, mucho más fácil y sencillo, que nos ayuda a eludir esa culpa y a negarla.
Los otros son espejos. Que suelen devolvernos la imagen que escupimos. [Me pregunto cómo puede ser qué algo tan diáfano se nos borronée de esa manera. Al punto de, prácticamente, olvidarlo].
Poniendo afuera lo malo, preservando lo bueno. De eso modo, logramos sobrevivir los azotes de un lugar, repleto de gente cómo uno. Qué se sabe tan bondadosa cómo inocente.
Y así no funciona. En todos lados hay responsabilidades. Siempre. El tema es que uno sabe dónde puede hacerse el loco, y no responder a ellas.
Pero si nos avisaran de ante mano que las cosas son así, uno podría estar armado con cierto bagaje para responder ante la irresponsabilidad del otro. Pero no. Los espejos no reflejan lo que no aceptan que son. Por lo tanto, es una característica que nos ocultan hasta que algo, de algún modo, nos sopapea y nos devuelve a la realidad. Esa realidad que abandonamos, a merced de ésta ilusión.
Eventualmente las cosas pueden salir bien, es cierto. Sin embargo, uno vive con una sensación de alerta permanente. Cómo esperando que algo suceda. Que alguien corte, de cuajo con la buena racha prestada y nos lleve derechito y de prepo hasta la desdicha, sin escala.
Pareciera que uno vive con un manto en los ojos que cubre, aunque no del todo, la malicia de quienes nos rodean. Llega un momento en el que somos profanados, y nos quitan hasta ese velo, que nos resguardaba de tanta crudeza.
Hay un mandato primero que todos nos ocupamos en cumplir. Que nos obliga a ser buenos, culposos, y concientes. Lo que sucede, es que inmediatamente hay otro, mucho más fácil y sencillo, que nos ayuda a eludir esa culpa y a negarla.
Los otros son espejos. Que suelen devolvernos la imagen que escupimos. [Me pregunto cómo puede ser qué algo tan diáfano se nos borronée de esa manera. Al punto de, prácticamente, olvidarlo].
Poniendo afuera lo malo, preservando lo bueno. De eso modo, logramos sobrevivir los azotes de un lugar, repleto de gente cómo uno. Qué se sabe tan bondadosa cómo inocente.
Y así no funciona. En todos lados hay responsabilidades. Siempre. El tema es que uno sabe dónde puede hacerse el loco, y no responder a ellas.
Pero si nos avisaran de ante mano que las cosas son así, uno podría estar armado con cierto bagaje para responder ante la irresponsabilidad del otro. Pero no. Los espejos no reflejan lo que no aceptan que son. Por lo tanto, es una característica que nos ocultan hasta que algo, de algún modo, nos sopapea y nos devuelve a la realidad. Esa realidad que abandonamos, a merced de ésta ilusión.
[Paganas fantasías].
26 Arengaron conmigo on "El porvenir de una Ilusión"
Caro, yo soy bueno, pero nada de culpa y mucho menos de conciencia.
en cuanto a la inconciencia ajena, que cada uno curta la suya, eso si, a mi que no me vengan a querer reventar la cabeza por errores de ellos.
No se, con los años he logrado crear un escudo contra la boludez ajena, supongo.
igual, cuando te pones las pilas y dejás de quejarte por todo, escribis lindo.
besos de veranito porteño.
donde dice inconciencia ajena, debe decir irresponsabilidad ajena.
lo que decis del alerta permanente, es cierto, pero se debe a que nos moldearon asi, lamentablemente.
neron, uno tiene que ir por la vida, así como con mucho cuidado. Como muy por su senda sin mirar para los costados. El tema es que cada tanto se nos pianta la mirada para otro lado, y eso, ese encuentro con lo real tan real, a veces, es 'suficiete para querer vivir dentro de un tupper.
sí soy grossa, ai nou. ajjajajja
Ahora veo dónde dice incc. y no irresponsabilidad.
Sí a imagen y semejanza.
caro, si, es feo cuando uno ve lo real tan real.
lo de incc. e irresp. ajena se referia a mi primer comentario.
por eso yo a mi hija ya le puse orejeras, y la meti adentro del termo.
A saber:
Cuando fui bueno me pasaron por arriba.
Cuando fui responsable, me pasaron por encima.
Cuando me preocupaba por lo demas se aprovechaban de mi.
Por ende a partir de ahora:
Soy mas malo que Lita de Lazzari con los precios altos.
Los problemas de los demas me los paso por ese lugar que no da el sol, ese que esta al sur de nuestro cuerpo.
Y responsable solo de mis actos, del resto chupala cual helado de sabores intensos.
Nunca se está preparado ante la irresponsabilidad del otro. Ni ante la miseria ajena.
Igual uno va a haciendo un curso acelerado, y algo aprende. Pero no lo terminás de aprobar nunca, y te ligás más de un cachetazo.
ahhhhhhhhh con razon neron jajaj, busque la palabra icc y no la encontre jajaj
ana, tenés razon, uno nunca egresa en ciertos temas. lamentablemente, pero algo se aprende no?.
beso
ajaj Border, que buena exposición jaja comparto mucho de tus puntos, salvo lo del helado, qué feoooooo jjaja
QUE SE CAGUE LA COMISION DE BOCHAS !!!
vivi mucho tiempo esperando que los otros actuaran como yo lo haría en lugar de ellos.
así me fue!
hoy estoy mas curtido (evite el chiste facil) y por ende más canchero para enfrentar distintas situaciones
ABRAZO
La vida no es lo que nos contaron! Nos vendaron los ojos con un pañuelo de ilusiones y después el viento lo arrancó y dimos de cara con la realidad. Y hay que sobrevivir. Nos adaptamos como podemos, nos reflejamos en muchos otros, de algunos huímos, aprendemos y seguimos.
conparto con border y briks!
cada loco con su tema!
Hay un mandato primero que todos nos ocupamos en cumplir. Que nos obliga a ser buenos, culposos, y concientes. Lo que no sabemos es que inmediatamente hay otro, mucho más fácil y sencillo, que nos ayuda a eludir esa culpa y a negarla.
Maldita negación...
Yo creo que lo que no puede aceptar el que niega, es justamente la responsabilidad que no puede asumir. Pero no con los demás, sino con él mismo. No es un atajo, es incapacidad. Y no los justifico, porque en ese punto, un cómodo negador y un hijo de puta se parecen demasiado.
besotes carito
(me encantan estos posts, iu nou).
brikis, tal cual, no se puede esperar que los otros actuen en funcion de nuestros principio, porque es destructivo. es mejor dejar que nos sorprendan, bien, pero cómo se haceeeeeeeeee?
curtido?, ja, que curioso jajajaj
juls, sí, y por suerte, esos otros, aunque son poquitos, todavia reflejan.
beso
LL, veo que los hombres son mas pragmáticos, las mujeres nos quedamos pensando y pensando, y dando oportunidades, al final, tienen razon. todo al carajo. :)
lunita, ai nou ai nou.
Me encantó la similitud del negador con el hijo de puta, es cierto, porque en ese no ´querer´ saber, arrastra muchas otras cosas.
beso
La próxima vez en castellano dulce que no se entiende nada
Gracias
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"...Mil veces hubiera preferido eso, a generarme expectativa acerca de, lo más o menos digna, que podría ser la vida. Porque en definitiva, es cómo vivir una ilusión, que más tarde o más temprano, termina por arrancarnos la inocencia de un tirón."
Increiblemente cierto y pensar que hay ocasiones que aunque estamos ya predispuestos (por la experiencia) ante una situación igual caemos de inocentes y nos vulven a arrancar toda esa ilusión.
Licenciada:
como ve, todos vivimos inmersos en ilusión. La personalidad...la "personae"... etimológicamente la máscara griega.
Muchas cosas son un teatro...y el error no está en vivir así, pues a veces no nos queda otra, sino en creernos meros espectadores cuando somos actores y directores....diría yo.
Conservá tu inocencia, que te hará sufrir a veces pero te traerá mas felicidad que la que sueñan los insidiosos durante toda su vida.
abrazo desde san luis!
mamarracho, si tal solo hubiera alguien que nos robara todo de un tiron, y sin dejar resabios.... pero no, parece que quitaros la cosa de a poco, es mejor...
es verdad lo de la mascara, será por eso que hay tanto mentiroso dando vueltas? eh?
a la pucha, no estoy preparado para leer cosas de este nivel, pero tal vez esté un poco de acuerdo (un poco nomás)
horete, claro que estas bien preparado, y lo sabés. :)
Lo que quería decir es que no se entiende nada que quisiste decir nada más. Obviamente aclaro que es MI interpretación (o falta de ella) personalísima.
Estoy completamente seguro de que TOODOOOS entendieron el post. Yo no!, la verdad no entendí que quisiste decir
Besitos
(lo peor es que me quedo con la intriga)
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